¡¡¡ MI VIEJO SCALEXTRIC AÚN FUNCIONA !!!.
El pasado fin de semana, decidí desempolvar y sacar del armario en el que se amontonan, guardados, eso sí, muy cuidadosamente en sus respectivas cajas y embalajes originales, algunos de los juguetes con los que disfruté en mi juventud. El Ibertrén, los Juegos Reunidos Geyper, el Scalexboat, el Cinexin, un Mecano, ...., y, cómo no, mi querido Scalextric. Como no teníamos tiempo material de probar todos, tras una breve reunión con mis hijos, nos decidimos por el último que he mencionado.
Me puse manos a la obra y, tras casi hora y media de laborioso y concienzudo montaje, que se dice pronto, logré completar la pista en forma de 8 que se ve en la foto. A pesar de tener una antigüedad, el juego, no yo, de más treinta y cinco años y de encontrarse en dique seco durante unos 20, funcionó a la perfección. Los coches iban a la misma velocidad que entonces.
A los críos les gustó un montón y lo pasaron en grande. Yo tuve que contener los nervios, en más de una ocasión, al ver como mi hijo Iván, saltaba alegremente entre las pistas, al objeto de colocar su vehículo, en las múltiples ocasiones en que logró hacerlo salir de su carril. Y lo peor era que lo hacía sin soltar el mando, que estaba unido por un fino y delicado cable al correspondiente transformador.
Con una forzada sonrisa en los labios, pero apretando un poco los dientes, le transmití mi muy justificada preocupación por la integridad de ese juguete que me había durado tantos años, y que él, si persistía en su actitud, destrozaría en cuestión de minutos, jajaja. Gracias a Dios, parece que captó la idea y, aunque su coche pasaba más tiempo fuera que dentro del recorrido ( mantenía idéntica velocidad en las rectas que en las curvas ), cuando procedía a colocarlo, dejaba cuidadosamente el mando en el suelo.
Veremos si tengo la misma suerte cuando vayamos probando el resto de juguetes. Por cierto, que este repentino afán por conocer el estado de conservación de todas esas auténticas reliquias del pasado, tiene una explicación.
La misma que ha motivado que, últimamente, no tenga tiempo para escribir y haya descuidado un poquillo el Blog.
Pero ésta deberá esperar a un próximo Post. Ya os contaré.
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