DIARIO DE UN RODRÍGUEZ ( CONTINUACIÓN ).
Y llegamos al cuarto de los post que estoy dedicando a describir mi recién adquirida condición de Rodríguez.
El anterior, lo acompañaba de un texto humorístico al respecto de este tema. Como ya dije en él, debo reconocer que no cuento todo lo que me pasa como “ amito de casa “. Hay determinados “ accidentes caseros “, llamémoslos así, que no detallo aquí por razones más que obvias. Sería mucho más gracioso, pero no me quiero arriesgar.
Ayer al mediodía, me comí un pollito enano asado que estaba bastante bueno, y, de postre, un par de melocotones ( si me comiera la fruta de pieza en pieza, no acabaría nunca ).
Es extraño. Antes de pelar el melocotón, su tamaño era similar al de una pelota de tenis. Pues bien, una vez libre de piel, se asemejaba más bien a una de ping-pong. Una de dos. O tienen la piel muy gruesa o, lo que es más probable, en mi comprensible afán de no rebanarme el dedo, corté un poquito más de la cuenta. Pesaba más la piel que el propio melocotón.
Por la noche, me hice una de mis famosas pizzas ( le saqué hata una foto para daros envidia ). De postre, otro hermoso racimo de uvas.
El anterior, lo acompañaba de un texto humorístico al respecto de este tema. Como ya dije en él, debo reconocer que no cuento todo lo que me pasa como “ amito de casa “. Hay determinados “ accidentes caseros “, llamémoslos así, que no detallo aquí por razones más que obvias. Sería mucho más gracioso, pero no me quiero arriesgar.
Ayer al mediodía, me comí un pollito enano asado que estaba bastante bueno, y, de postre, un par de melocotones ( si me comiera la fruta de pieza en pieza, no acabaría nunca ).
Es extraño. Antes de pelar el melocotón, su tamaño era similar al de una pelota de tenis. Pues bien, una vez libre de piel, se asemejaba más bien a una de ping-pong. Una de dos. O tienen la piel muy gruesa o, lo que es más probable, en mi comprensible afán de no rebanarme el dedo, corté un poquito más de la cuenta. Pesaba más la piel que el propio melocotón.
Por la noche, me hice una de mis famosas pizzas ( le saqué hata una foto para daros envidia ). De postre, otro hermoso racimo de uvas.
Y llegamos al cuarto de los post que estoy dedicando a describir mi recién adquirida condición de Rodríguez.
Hoy se cumplen ya 7 días, y la verdad es que estoy un poco cansado de fregar platos y tal. Además, para ser sólo una persona, sigo sin entender la extraña cantidad de vajilla y cubiertos que me esperan en el fregadero. Está visto que las faenas del hogar no son lo mío. Pero no me queda otra.
Anoche estuve viendo “ Shutter Island “, la última peli de Martin Scorsese. No está del todo mal, aunque muy alejada de las maravillosas obras maestras a las que nos tenía acostumbrado. Aún así, muy entretenida.
El sábado ví la de “ Green Zone “, de Paul Greengrass. Muy normalita. Para pasar el rato, sin más.
No se ven buenas películas últimamente. Entretenidas sí, bastantes. Pero ninguna de las de quitarse el sombrero. No corren buenos tiempos para la industria cinematográfica. Da igual. Simepre podemos recurrir a los clásicos y revisarlos una y otra vez, puesto que nunca cansan ni pasan de moda.
Mi vecina Malen ya ha vuelto de vacaciones, así que ahora debo regar y estar pendiente de algunas plantitas menos.
Os dejo, me toca regar y lavar los platos de la cena. Parece mentira, pero la vida es así. Creo que ya sé donde se encuentra casi todo lo necesario para llevar a cabo mi importante misión. Sólo me queda pasar la prueba de la lavadora. Ya os contaré ... .
Hoy se cumplen ya 7 días, y la verdad es que estoy un poco cansado de fregar platos y tal. Además, para ser sólo una persona, sigo sin entender la extraña cantidad de vajilla y cubiertos que me esperan en el fregadero. Está visto que las faenas del hogar no son lo mío. Pero no me queda otra.
Anoche estuve viendo “ Shutter Island “, la última peli de Martin Scorsese. No está del todo mal, aunque muy alejada de las maravillosas obras maestras a las que nos tenía acostumbrado. Aún así, muy entretenida.
El sábado ví la de “ Green Zone “, de Paul Greengrass. Muy normalita. Para pasar el rato, sin más.
No se ven buenas películas últimamente. Entretenidas sí, bastantes. Pero ninguna de las de quitarse el sombrero. No corren buenos tiempos para la industria cinematográfica. Da igual. Simepre podemos recurrir a los clásicos y revisarlos una y otra vez, puesto que nunca cansan ni pasan de moda.
Mi vecina Malen ya ha vuelto de vacaciones, así que ahora debo regar y estar pendiente de algunas plantitas menos.
Os dejo, me toca regar y lavar los platos de la cena. Parece mentira, pero la vida es así. Creo que ya sé donde se encuentra casi todo lo necesario para llevar a cabo mi importante misión. Sólo me queda pasar la prueba de la lavadora. Ya os contaré ... .
1 comentario:
Leer el mundo blog, bastante bueno
Publicar un comentario